El ser humano como la naturaleza puede ser descrito o medido por períodos. Los ciclos lunares, las estaciones, el día y la noche condicionan nuestro devenir cotidiano. El "reloj biológico" determina la vida de una persona. En los países asiáticos los biorritmos eran conocidos hace más de 3000 años. El famoso "libro de los cambios" sobre el I-Ching que predice el futuro y da consejos para cualquier suceso está basado también en los biorritmos.

Los primeros estudios sobre los biorritmos fueron hechos en Berlín en el siglo XIX por el científico Wilhelm Fliess. El Dr. Fliess desarrolló dos teorías básicas: la primera, que la naturaleza se manifiesta en el hombre a través de "un reloj interno" el cual empieza a contar a partir de la fecha de nacimiento; la segunda, que uno de esos relojes regula un ciclo de 23 días que influencia la condición física y otro regula un ciclo que influencia las emociones o grado de sensibilidad.

Actualmente los biorritmos pueden explicar las razones por las que uno se encuentra en buen o mal estado sin causa aparente, estar cansado cuando es incapaz de hacer nada o sentir una oleada de fortaleza para realizar lo mejor.

La teoría puede hacer posible saber con certeza cuando una persona puede conseguir lo mejor en sus negocios, deporte, educación o incluso en su vida privada. Los biorritmos son también extensamente usados para prevenir accidentes, controlar la salud y predecir la compatibilidad entre semejantes.

Cada uno de los biorritmos comienza con el nacimiento. El ciclo está dividido entre la fase activa (sobre cero) y la pasiva (bajo cero). El día o momento en que se pasa de una fase a otra puede considerarse como una etapa crítica, durante la fase crítica las habilidades asociadas son inestables, es de sabios ser prudentes mientras dure esa fase.

Ritmos primarios

Los tres ciclos primarios son:

Físico: Los 23 días del ciclo monitorizan la fuerza, el aguante, el poder y la salud de la persona. En definitiva, la energía, potencia sexual y física.

Emocional: Los 28 días del ciclo rastrean la estabilidad, la positiva energía de tu psique y tu actitud ante la vida, así como la capacidad de tener afinidad y armonía con otras personas. En definitiva, las emociones y los sentimientos.

Intelectual: Los 33 días del ciclo representan la dinámica intelectual de la persona, verbal, matemática, simbólica y habilidad creativa, así como la capacidad para aplicar la razón y análisis al mundo que te rodea. En definitiva, facultades mentales, lógica and funciones cerebrales.

Ritmos secundarios

Intuitivo: Los 38 días del ciclo fueron descubiertos posteriormente y no pueden ser considerados como uno primario. Sin embargo puede ser útil para saber que hacer en caso de duda con los otros ciclos, como "un sexto sentido". El ciclo sigue la huella de la percepción inconsciente y los instintos.